Clostridium Perfringens

Generalidades

El género Clostridium se caracteriza por seren bacilos Gram+, anaerobios de gran tamaño formadores de esporas.

En el caso del Clostridium Perfringens raramente forma esporas y podemos dividirlo en cepas, donde las cepas A, B y E son las que tiene mayor  relevancia clínica.

El C. Perfringens Cepa A: es ubicuo en la naturaleza, principalmente en el suelo, agua contaminada con heces y habita con frecuencia el aparato digestivo del humano y animales, puede formar esporas y sobrevivir por años en el ambiente externo.

Las cepas B y E diferente de la cepa A, no logra sobrevivir en el suelo, pero pueden colonizar el ser humano.

Enfermedad Clinica

C. perfringens puede causar una serie de infecciones en las partes blandas, que incluyen celulitis, fascitis (miositis supurativa) y mionecrosis (gangrena gaseosa) con formacion de gas en el tejido blando. La mionecrosis por clostridios suele deberse a C. prefringens, aunque otras especies (C. septicum, C. histolyticum, C. novyi) tambien pueden producirla. Es una enfermedad que pone en peligro la vida.

El inicio de la enfermedad es caracterizado por un intenso dolor, se suele desarrollar a lo largo de la semana siguiente después de la introducción de esas bacterias en un tejido, como por ejemplo en casos de traumatismos o una intervención quirúrgica. Las manifestaciones clínicas son rápidas y se observa una extensa necrosis muscular que evoluciona a un shock, insuficiencia renal y la muerte. Todo eso en apenas dos días después del inicio del cuadro clínico.

Celulitis por Clostridium

Tratamiento

Las infecciones de partes blandas asociadas a C. perfringens, como la miositis supurativa y la mionecrosis, se deben tratar de manera intensiva mediante intervenciones de desbridamiento quirúrgico y altas dosis de penicilina. El tratamiento con oxígeno hiperbárico se ha usado en estas infecciones, aunque sus resultados no son concluyentes. A pesar de todos los esfuerzos terapéuticos, el pronóstico de los pacientes con estas enfermedades es desfavorable y su mortalidad comprende entre un 40 y un 100%. Las infecciones de partes blandas menos graves y localizadas se pueden tratar con éxito mediante el desbridamiento y la administración de penicilina.

Las intoxicaciones alimentarias por clostridios se tratan con rehidratación oral y en los casos graves con líquidos y electrolitos por vía intravenosa. No se recomienda el tratamiento antibiótico, ya que se trata de una enfermedad que se resuelve de forma espontánea (es decir, la diarrea elimina las bacterias de! tubo digestivo y la micro flora intestinal normal vuelve a establecerse por si sola).

Patogenia

El C. Perfringers produce varias toxinas:

1. Toxina alfa: que tiene la capacidad de provocar una hemolisis masiva, lisando (destruyendo) los eritrocitos, plaquetas, leucocitos, células endoteliales y aumentan la permeabilidad vascular.
2. Toxina Beta: que provoca una estasia intestinal, destrucción de la mucosa con necrosis.
3. Toxina épsilon: que aumenta la permeabilidad vascular del tubo digestivo.
4. Toxina iota: que es necrosante, letal y aumenta la permeabilidad vascular
5. Enterotoxina: (superantigeno)

Advertencia!

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Bibliografia

Todas las informaciones escritas en esta pagina web son basadas en la interpretacion del libro de microbiologia medica de Murray, Rosental, Pfaller 8 Edicion.